Emilio Márquez

Castigando al inmigrante

6 Febrero 2009 , Escrito por Emienemiblog Etiquetado en #...sus reflexiones, #alarma, #aprobar, #derechos humanos, #Está pasando, #inmigración, #italia, #ley, #Política internacional, #proyecto, #racismo, #violencia

El derecho de toda persona a inmigrar, saliendo de su propio país para establecerse en otros, está recogido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, sin embargo, se encuentra supeditado a las legislación concreta de cada país. Esta situación provoca que se vulneren muchos de los derechos que los inmigrantes tienen, por el simple e importante hecho de ser persona.

En este último año el país transalpino ha sido noticia en el terreno de la inmigración. Cierto es que Italia es un país que en la última década ha sufrido grandes oleadas de inmigración, mayoritariamente de los países de Europa del Este, que se encuentran muy cercanos. Tras algunos episodios de violencia, se ha producido una fuerte alarma en la sociedad italiano, surgiendo cierto sentimiento de desconfianza. Cuando estos nacen y se alimentan con medidas que atentan contra los derechos de los inmigrantes, la sociedad debe plantearse ciertos aspectos.

Ayer leía una noticia, que no me dejaba indeferente. Al parecer el senado italiano ha dado el visto bueno a ciertos aspectos de una ley en seguridad, que a mi parecer, no soluciona nada sino que potencia los problemas. Entre otras medidas, se aprueba que los médicos puedan denunciar a los inmigrantes indocumentados que asistan a sus consultas. A los profesionales del sector sanitario les parece una verdadera calamidad dicha propuesta. La función clara que tiene todo médico, es curar. Aprovechar la sanidad, un servicio al que recurrimos por necesidad, como anzuelo para cazar a los indocumentados, es despreciable.

Otro aspecto que recoge este proyecto de ley y que también ha sido aprobado por el Senado,  es la obligación por parte de los inmigrantes de pagar entre 80 y 200 euros de impuesto para obtener y renovar el permiso de residencia. Una solución muy próspera a nivel monetario para el Estado pero poco útil a nivel social. Para que este proyecto de ley se convierta en Ley sobre Seguridad,  primero debe ser aprobada en su totalidad por el Senado y después por la Cámara de Diputados. En cualquier caso, da la sensación que los políticos italianos reflexionan poco y conocen menos,  la realidad.

Entre los amig@s y conocid@s que han estado viviendo en países europeos, algunos han tenido que pasar por las oficinas de extranjería. Aún siendo ciudadano europeo, son algunos los permisos e inscripciones que tienes que hacer. Muchos de ellos me han comentado las largas jornadas que pasan los inmigrantes en oficinas atestadas, intentando legalizar su situación. Y esta es sólo una cara de lo que supone ser inmigrante.

Ponerse en el lugar de los "otros" es una terapia a la que conviene someterse para ver el mundo desde un prisma más real y resolutivo.

Actualización: Cómo era de esperar, los médicos italianos se niegan a denunciar a los inmigrantes.

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H
<strong>Noticia destacada en Mundo.es...</strong><br /> <br /> El derecho de toda persona a inmigrar, saliendo de su propio país para establecerse en otros, está......
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J
El caso de Italia, tiene tíntes de otra indole.<br /> Sí, la realidad es muy distinta; cuando hay guerra en un país la gente se queda desprotegida, sín casa, vestido y sustento, por lo qué tiene la necesidad de salir de su país para salvar la vida. <br /> En otro escenario, algunos países hermanos, amigos, familia; abren la puerta de su corazón, de sus arcas, valores, ofreciendo posiblidades de desarrollo a nuevos hermanos que llegan a compartir la vida con los ciudadanos nacionales; dejando a un lado prejuicios e interrogantes. El caso de México y varios países, qué durante, antes y después de la guerra civil española abrío fronteras a cientos de familias enteras, huerfanos, olvidados, y demás.<br /> Afortunadamente los tiempos cambian, es decír, a favor de unos y en contra de otros; sería imposible abrir fronteras a todas las personas, se sobre entiende. El punto en dicusión es la actitud, muchas veces no grata a gente de la mísma lengua materna, ignorando las circustancias, incluso familiares, por las que cada individuo ha llegado a España.
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M
La ley, en cuanto a inmigrantes se refiere, es un tanto peliaguda.<br /> <br /> Es cierto que hay que ponerse en el lugar de los otros, pero también hay que ponerse en el lugar de los países.<br /> <br /> La entrada de inmigrantes a cualquier país, debe realizarse de un modo muy controlado. Y si no existen leyes, hay que hacerlas. Lo que no puede ser es que cualquiera pueda ir a cualquier país a hacer lo que le dé la real gana, incluso cuando lo que le da la gana es robar, matar y beneficiarse de una Seguridad Social a la que no aporta nada y que pagan entre todos los ciudadanos nativos y extranjeros que sí aportan ingresos al estado.<br /> <br /> La inmigración debe estar regularizada. En España ya hemos comprobado cuales son las consecuencias de abrir las fronteras y dejar entrar a cualquiera.<br /> <br /> Lo "guay" es decir que el mundo es de todos y que todos pueden ir a todas partes. La realidad es muy distinta.
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E
@María, desde luego hay que controlar la delincuencia, ya sea de nativos o inmigrantes, la ley siempre debe actuar. A nadie le debe dar la gana robar o matar sin castigo, eso es claro.<br /> ¿Pero acaso hay que abandonar el estado del bienestar? ¿No debería haber un derecho universal de acceso a la sanidad? Hay que tener en cuenta que si un segmento de la población no puede acceder a la sanidad este hecho contrae un mayor riesgo de epidemias para todos, nativos y emigrantes.<br /> Y en cualquier caso, el debate que quiero abrir es que los médicos se forman para curar, no para denunciar y ser vigilantes. Curar al enfermo debería ser la única obligación del personal sanitario. Para controlar a los que se saltan la ley está la policía y los cuerpos de seguridad del estado.
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