cientifico
Las carencias científico-técnicas de la lengua española
El español es una de las lenguas más habladas en el mundo, ocupando el segundo puesto mundial como lengua materna y tercera por su uso en Internet. Su uso y estudio se ha extendido y en ello están jugando un papel protagonista los institutos de idiomas repartidos por el mundo. Uno de los veteranos y mejor valorados es el Instituto Cervantes. Esta entidad con años de experiencia en la docencia del castellano ha publicado junto con la editorial Santillana el libro "El español: lengua para la ciencia y la tecnología".
[caption id="attachment_14135" align="alignleft" width="300" caption="Instituto Cervantes. Imagen de la wikipedia"][/caption]
A través de esta publicación se ha puesto en evidencia que es necesario impulsar el español en el panorama científico-técnico. Esta obra de 136 páginas trata de abordar la situación de las publicaciones y el panorama del español como lengua vinculada a la sociedad de la información con el fin de proponer distintas vías de actuación para fomentar y difundir el español científico-técnico.
El grupo de filólogos, científicos y filósofos que ha intervenido en el libro reclama la necesidad de colocar el español científico y técnico al nivel en que se encuentra el español genérico, literario y de negocios, que goza de un lugar destacado. Los primeros a intervenir en esta difusión serían los mismos científicos españoles que reconocen encontrarse más cómodos hablando en inglés entre ellos.
Un paso tan necesario como que la ciencia española también sepa hablar en inglés.
Más en la red.
- http://edmarfisica.blogspot.com La ciencia no entiende el español.
- www.ellibrepensador.com Proponen crear un nuevo índice internacional para valorar las revistas científicas.
- http://biqfr.blogspot.com El idioma español eclipsado por el inglés en la ciencia.
Proyecto Manhattan
[caption id="attachment_7952" align="aligncenter" width="280" caption="Trabajadores del proyecto Manhattan. Imagen de la wikipedia"][/caption]
En más de una ocasión he comentado desde mi blog que me gusta la historia. Esa ciencia que estudia el pasado del hombre y que narra acontecimientos que han ido haciendo del mundo lo que es hoy. La historia contemporánea por eso de ser la más cercana en el tiempo a nosotros y testigo de episodios que han tenido fuertes repercusiones posteriores y trágicas consecuencias, es una de las etapas más estudiadas y analizadas. Los debates historiográficos se han multiplicado y aún son muchos los investigadores históricos que siguen analizando las fuentes en busca en nuevas conclusiones.
El Proyecto Manhattan es la denominación que recibe una investigación científica que tuvo lugar durante la segunda Guerra Mundial . En ella estuvieron involucrados los científicos más importantes de la época, entre ellos el gran Albert Einstein, aunque este último no llegó a intervenir activamente. Estas investigaciones realizadas en EEUU fueron dirigidas por el físico Oppenheimer, y tenían como objetivo final el desarrollo de la primera bomba atómica.
El proyecto resultó un despropósito por todos lados. Para empezar, la mayoría de las personas que intervinieron en la investigación desconocían la magnitud de lo que se traían entre manos. La investigación era un secreto de estado y las autoridades decidieron ocultar el enorme riesgo que suponía trabajar en él. Por otro lado, para lograr el apoyo del Gobierno norteamericano en la investigación, un grupo de científicos judíos usó la reputación del premio nobel Albert Einstein. Él fue quien escribió al presidente Roosevelt una carta en la que le alertaba de la necesidad de adelantarse a los alemanes, que podían estar usando la energía nuclear para crear bombas de destrucción masiva.
El miedo acabó por cegar las mentes de todos los que intervinieron en este proyecto. El resto de la historia es de sobre conocida, los días 6 y 9 de agosto se lanzaban dos bombas atómicas, bautizadas con los nombres Little Boy y Fat Man sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki. Muchos de los que intervinieron en el proyecto se lamentaron amargamente de las consecuencias de una investigación que quizás nunca debió abandonar su caracter hipotético. El mismo Einstein que con aquella carta también manchó sus manos de sangre inocente, dijo "debería quemarme los dedos con los que escribí aquella primera carta a Roosevelt". Muchos emprendieron posteriormente firmes posturas pacifistas, sin embargo la bomba atómica ya había sido desarrollada y mucho peor, puesta a prueba.
Más en la red:
- http://homohominilupus.wordpress.com Google, educación y la bomba atómica.
- http://gonzalorobles.wordpress.com El final de una rivalidad.
- http://cienciayficcion.wordpress.com Película "Creadores de Sombras".